
Hola Travelers!!!
Estamos de vuelta, y es que en estos terribles tiempos de pandemia nos han cortado las alas entre otras muchas cosas y no hemos podido hacer lo que más nos gusta; VIAJAR.
Así que de momento hacemos excursiones por Cataluña que sabemos que también os gustan, aunque pronto volveremos a retomar nuestra vida de antes y volveremos a enseñaros sitios increíbles.
Hoy os traemos una excursión por las Montañas de Prades, en Tarragona. Una enorme zona verde para disfrutar de los paisajes y la tranquilidad.
Este post contiene 3 visitas que hicimos en la ruta:
- Niu de l’Àliga
- Avencs de la Febró
- Ermita de l’Abellera
¿Queréis disfrutar de estos lugares increíbles?. Comenzamos!!!!
Niu de l’Àliga
Es una preciosa poza de agua con cascada. En verano os podréis bañar sin problema. Os indicamos cómo llegar:
Desde Barcelona, tendréis que ir hasta Alcover. Se tarda 1h 30min. Si ponéis en Google Maps «Niu de l’Àliga», os llevará sin problema al parking donde tenéis que llegar.
El parking son 10€, nos pareció un abuso, pero no tuvimos más remedio que pagarlo. Así que una vez aparcado el coche, desde el propio parking comienza la ruta. Hasta llegar al Niu de l’Àliga son unos 40 min. La ruta es muy sencilla y bastante llana en casi su totalidad.
Llegaréis a la primera bifurcación, donde un letrero de madera os indica que vayáis a la derecha.


En la foto de la derecha, el pequeño letrero que se ve a la derecha de la foto es el mismo que el de la foto de la izquierda. Bueno pues deberéis tomar el camino de la izquierda. Por el otro lado también vimos después que se puede llegar, pero según los letreros, son 300 metros más.
Llegaréis a otra pequeña bifurcación, en estos letreros no veréis el Niu, pero tenéis que coger el camino de la izquierda.

Más adelante veréis una puerta, que aunque ponga que vais a acceder a una zona privada, caminando se puede entrar. Así que pasáis por su lateral.

Luego os encontraréis con otra bifurcación donde un camino asciende por la izquierda y debéis tomar el de la derecha.

Veréis en algún tramo que las vistas son muy chulas.

Ahora llegaréis a un río el cual tendréis que pasar por encima de las piedras y continuar el camino.

Ahora veréis un edificio abandonado y en ruinas. El camino os lleva hasta él y encontraréis un pequeño puente de madera que NO tenéis que pasar por él. Por ahí viene la otra ruta desde el parking que os dijimos antes que son 300 metros más, así que a la vuelta, podéis ir por allí si queréis. Nosotros volvimos por el mismo sitio.
Rodeando el edificio, tendréis que subir estas escaleras de piedra.

Y una vez arriba, veréis este pequeño camino que desciende hasta el río.

Una vez lleguéis abajo, seguís por la derecha dejando el río a vuestra izquierda y vais hasta el final para llegar al precioso Niu de l’Àliga.

Tenemos que decir que es mucho más impresionante estando allí. Es muy grande y la cascada muy alta, pero al estar lejos no se aprecia.
Una vez allí, os toca seguir disfrutando de la naturaleza. Nosotros comimos allí unos bocatas.
Volvimos al coche y nos fuimos a nuestro siguiente punto.
Avencs de la Febró
A 45 min en coche, llegamos a este precioso lugar.

Se trata de una grieta abierta de unos 250 metros de longitud, y de unos 30 metros de profundidad. Es una ruta diferente y os dejará entusiasmados como nos pasó a nosotros.
CÓMO LLEGAR:
Si ponéis en Google Maps «Avencs de la Febró», os llevará hasta el parking donde tenéis que llegar. Nosotros desde el Niu de l’Àliga, tuvimos que volver a Alcover y coger la carretera TV-7041 hasta un cruce donde indica La Febró y entras en la carretera TV-7045. Más adelante, en otro cruce, tendréis que ir a la derecha dirección La Febró por la carretera T-704. En esta carretera, veréis una indicación al pueblo abandonado «La Musara». Nosotros no pudimos visitarlo porque no nos dio tiempo, pero lo tenemos pendiente.
Seguís un poco más adelante, y Google Maps os indicará que giréis a la derecha por un camino. Si tenéis un coche alto, podréis aparcar en el parking que hay dentro del bosque, pero si no, en la carretera T-704, un poco más adelante a mano derecha hay una expansión de tierra donde lo podréis dejar e ir andando.
Nosotros aparcamos en el parking del bosque y desde ahí comienza la ruta.
La ruta está bien indicada en su primera parte, pero hay en un punto que es muy fácil que os perdáis, y si no queréis que os pase como nos pasó a nosotros que nos fuimos hacia otro lado y después nos tocó dar la vuelta, estad atentos a nuestras indicaciones y podréis llegar sin problema.
Lo primero que vais a ver es esta bifurcación donde hay un árbol con una cruz blanca y amarilla a la izquierda y otro con unas líneas de los mismos colores a la derecha. Tendréis que ir a la derecha, ya que tendréis que seguir la ruta con las líneas blancas y amarillas.


Durante la ruta (unos 20 min), veréis siempre estas indicaciones. Estad atentos porque a veces están en los árboles y otras veces en las rocas, pero se ven bien.

Y ahora viene el momento donde os PODÉIS PERDER. Hasta ahora, hemos seguido el camino de líneas blancas y amarillas, pero cuando veáis esta roca en el suelo con la cruz blanca y amarilla, tendréis que continuar el camino por ella.


En la foto, estoy señalando la roca con la cruz y el camino por el que debéis seguir. YA ESTÁIS MUY CERCA!!!
Un poco más adelante, veréis unas piedras que descienden. Tenéis que bajar por ellas con mucho cuidado. No es difícil y es un tramo muy corto.

Y una vez abajo, veréis la entrada a la grieta. La primera vista es totalmente impresionante, con una enorme piedra encajada que parece que se nos va a caer encima.



Notaréis como la temperatura desciende de una manera exagerada, a nosotros nos salía vaho de la boca jejejeje.
MUCHO CUIDADO AL BAJAR!!!! La piedra está mojada y escurre mucho.
Una vez abajo del todo, encontraréis a la izquierda la entrada a una cueva. Parece pequeña, pero es bastante grande. Nosotros la iluminamos con las linternas del móvil, pero no era suficiente, os recomendamos que llevéis una linterna.


Salimos de la cueva y continuamos el camino de la grieta.

Y llegamos al final. Allí veréis una escalera anclada a la roca de una vía ferrata.

Si no vais provistos de un arnés y mosquetones, os recomendamos no subir porque es peligroso, pero yo no me pude resistir.


Y ahora toca deshacer el camino que hemos hecho y volver al coche.
Nos dirigimos a nuestro siguiente y último punto del día. Tardamos 20 min en llegar.
Ermita de l’Abellera
Tenéis que continuar por la carretera T-704 hasta casi llegar a Prades, pero si ponéis en Google Maps el nombre de la ermita os lleva sin problema.
Aparcáis el coche y visitáis esta preciosa ermita pegada a la roca. Nosotros cuando llegamos estaba cerrada, pero la pudimos ver a través de la puerta. Las vistas desde allí también son preciosas.

DÓNDE DORMIR:
Nosotros esta ruta la hicimos en el día y después volvimos a Barcelona, pero en Prades hay un alojamiento en el que nos quedamos una vez que estuvimos por esta zona y es totalmente recomendable. Se llama «Xalet de Prades» y son unos iglús hechos a mano con el techo de cristal para poder ver las estrellas. Os hablamos de él en un post haciendo CLICK AQUÍ ⬅️.
Esperamos que os haya gustado esta bonita ruta. Nosotros encantados de poder ayudaros en todo lo que necesitéis.
Muchas gracias por leernos.
RECORDAD QUE:
